CAMINO DE SANTIAGO
Deoarece traducerea în spaniolă a primei mele cărți devine din ce în ce mai adevărată, vă las aici un fragment, spre delectarea celor care cunosc limba lui Cervantes. Dacă aveți observații, sunt foarte bine venite.
ENTRE LA TIERRA Y EL CIELO EN EL
CAMINO DE SANTIAGO
El Camino francés, 2012
Antes del Diario
¡Es bueno encontrarte, querido lector! Me alegro de que vamos a pasar algún tiempo juntos, de que vas a estar ahí para mí y tu corazón va a latir más rápido, te vas a divertir o vas a llorar conmigo, vas a sentir la peor parte de las subidas y los horrores de los descensos llenos de baches, vas a tomarme de la mano y tratar de quitarme la carga de los hombros en las próximas páginas, que espero que sean lo suficientemente interesantes, para que no dejes el libro durante días en el borde de un sillón, abierto en la página „x”, donde te has quedado dormido y no te has molestado ni siquiera en volver a ponerlo en la biblioteca.
Desde que era adolescente, quise escribir un libro, pero siempre me estaba topando de la falta de un tema real y emocionante que me pusiera a trabajar. Cuando, por fin, conseguí el tema, surgieron dudas y tal vez un poco de pereza, o no sé cómo catalogar la sensación que me estaba intentando inmediatamente después de que terminara la peregrinación. Tal vez el trágico final de mi gran aventura me mantuvo alejada de la mesa de trabajo durante tanto tiempo, la sensación de derrota e inutilidad de todo mi viaje, que me siguió por un tiempo, todo esto se derritió, y un día, me puse a trabajar.
Y, esto es lo que escribí…
Este Diario „ha madurado” en mí durante un año y medio, hasta que me armé de valor para empezar a ponerlo en papel. De hecho, supe desde el principio que había experimentado cosas absolutamente maravillosas y dignas de ser escritas, pero como no tenía experiencia en la escritura, y mi agenda diaria estaba extremadamente ocupada, seguí posponiendo hasta que no pude más. Todos los acontecimientos y palabras estaban en mi corazón, pidiendo el derecho a la vida, el derecho a salir a la luz para expresar todo lo que sentí durante los 28 días de peregrinación y después de eso, hasta mi retorno a casa.
Solo había escrito unas pocas páginas, pero ya tenía curiosidad por saber si le gustaría a los que lo leían, si me traería fama y reconocimiento…
Ahora, cuando lo he terminado, me doy cuenta de que el mayor regalo que me he dado escribiéndolo es que he podido revivir casi con la misma intensidad todos los momentos importantes de mi peregrinación y darme cuenta de ciertas cosas, que, por el momento, de alguna manera se han quedado escondidas en la niebla. Quiero decir, en este momento de mi existencia, soy completamente indiferente si voy a ser criticada o aclamada, si voy a tener 50, 500 o 5000 lectores, lo más importante es que he logrado verter todo lo guardado en mi corazón y pararme ante ustedes con mis palmas mirando al cielo, en el más puro gesto de sinceridad.
Puedo decir con la mano en el corazón que no inventé nada, no he inflado la verdad, todo sucedió exactamente como lo dije. Si en algunos lugares parece un poco fuera de los patrones de normalidad, los que han estado en el Camino de Santiago saben que lo normal aquí en la vida cotidiana no coincide con lo normal allí. Ese camino está lleno de magia, buenas hadas y ángeles, y si no crees, todo lo que tienes que hacer es tomar algunas cosas en una mochila e ir a la carretera.
Tuve muy pocas notas tomadas en el acto, pero aumenté la imagen de los mapas de la guía por los que agradezco sinceramente a Edita, y, para mi asombro, cuando miré de nuevo el mapa, recordé en detalles los acontecimientos que se desarrollaban en ese tramo de carretera. Incluso cuando regresé, no podría enumerar las localidades por las que había pasado, pero ahora, es como se ponen en la cuerda de mi mente las perlas hechas de tallo de saúco, coloreadas con acuarelas, que estaba haciendo en primer grado. Era como ver una película conmigo en el papel principal, ser a la vez actriz y espectadora, el hechizo de lo que sucedió allí siendo igual de poderoso, incluso después de tanto tiempo.
Estoy segura ahora de que si has estado en Camino una vez, nunca lo vas a dejar, y tu vida dará un giro feliz, sin esfuerzos ni tropiezos. Solo tienes que ceder tu voluntad a los acontecimientos, dejarte ir al azar, para recibirlo todo con serenidad y no culpar a nadie de lo que te está pasando, aunque de momento pienses que es algo negativo, porque tú mismo eres el artesano de tu vida, a pesar de que aún no seas consciente de ello. Puede ser necesario que aprendas una cierta lección, o simplemente que te vuelvas más fuerte y más consciente de quién eres y quién quieres llegar a ser.
Por lo tanto, te deseo una lectura agradable, esperando que estas líneas te hagan al menos pensar, si no subir en el tren o el avión, para llegar a los maravillosos lugares donde la conciencia está más viva y la vida abre nuevas perspectivas, ayudándote a convertirte en la mejor versión de ti mismo a partir de esta experiencia.
Manuela Sanda Băcăoanu